Diciembre 4 Lectura: Esdras 1:1-2:70
Regreso del exilio
En los días que restan de diciembre estaremos leyendo y meditando en
los libros de Esdras, Nehemías y Ester. Que haya bendición.
Dios le da un carácter de urgente al regreso del pueblo del exilio, es
por eso que el decreto de Ciro, se da en el primer año de su reinado, cuando despertó
su espíritu (1:1).
“De palabra… y por escrito”, de esta manera pregonó Ciro, reconociendo
que Dios era quien le había dado todos
los reinos que poseía y que le había mandado a edificar casa (Isaías
44:48-45:4; 1:2). Esto último podemos considerarlo como una alusión directa a
la promesa central de la promesa hecha a David. Aunque Ciro está pensando sólo
en la casa de Jerusalén, pensar en ambas casas, Jerusalén y la del pacto con
David es inevitable. La orden de Ciro
fue que regresara el pueblo y que fueran ayudados con plata, oro, bienes y
ganados y ofrendas para la casa de Dios (1:2-4).
La obediencia de los jefes, de los sacerdotes, levitas y de todos a
los que Dios despertó su espíritu es digno de resaltar. También los utensilios
de la casa de Jehová regresarían. En total fueron cinco mil cuatrocientos
utensilios de oro y plata (1:5-11).
El complemento de nuestra lectura (capítulo 2) es el registro
de los que subieron del cautiverio con Zorobabel. Hubo algunos, incluso de los
hijos de los sacerdotes que no pudieron demostrar la casa de sus padres, ni su
linaje, si eran de Israel, que buscaron su registro de genealogías, sin hallarlo. Los sacerdotes en
esta situación, fueron excluidos, hasta
consultarlo con Urim y Tumim.
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