Abril 7, Lectura: Romanos
8:19-27
La creación
1. Aguarda, con anhelo ardiente, la manifestación de los hijos de Dios (v. 19).
Uno de los beneficios de la redención definitiva del hombre. La acción de la
creación hemos de entenderla de esta manera: Espera hasta que llegue, entre
tanto, vigila ansiosamente con la cabeza hacia adelante en actitud anhelante.
2. Fue sujetada a vanidad de manera involuntaria (v. 20). Esto ocurrió
debido al pecado
3. Será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad
gloriosa de los hijos de Dios (v. 21). Hermosa promesa que nos hace pensar en
un cambio debido a lo que seremos cuando estemos con Cristo en gloria.
4. Gime y está con dolores de parto. No son dolores de muerte, y
consideremos que tras los dolores de parto hay regocijo.
Al gemido de la creación unimos el nuestro, que somos distinguidos con
las primicias del Espíritu, que esperamos “la adopción, la redención de nuestro
cuerpo” (v. 23).
Algo sobre esperanza: Un hermoso instrumento, por ella fuimos salvos,
en, por y para (v. 24). Ella nos pide paciencia al aguardar (v. 25).
No sabemos pedir como conviene porque somos débiles, pero el Espíritu
nos ayuda, nos echa la mano, y se pone a nuestro lado, intercediendo por
nosotros con gemidos indecibles (v. 27).
El Espíritu presenta nuestra causa delante de Dios, según su
intención. Haciendo así la voluntad de Dios (v. 27).
Sana doctrina: La manifestación de los hijos de Dios y su libertad
gloriosa. En espera de la adopción, la redención de nuestro cuerpo. Como no
sabemos pedir como conviene, el Espíritu mismo intercede por nosotros con
gemidos indecibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario