Abril 20, Lectura: Romanos 14:10-19
“Ya no nos juzguemos más”
Cada uno de nosotros daremos cuenta a Dios, por eso no debemos juzgar ni menospreciar. Todos
compareceremos en el tribunal de Cristo. Allí se doblará toda rodilla y se
confesará a Dios.
Puesto que esto será así, ya no juzguemos más, ni pongamos tropiezo
buscando hacer caer al hermano.
“Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien
decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano” es un texto muy apropiado
para los creyentes de hoy, está en armonía con lo que dijo el Maestro (Mateo.
7:1).
“Yo sé, y confío en el Señor Jesús” (v. 14): que estas palabras, en el
contexto en el que el apóstol las expresa, sean para nosotros una meta, andando
conforme al amor y considerando que también por mi hermano murió Cristo.
Que nuestro bien no sea vituperado, entendiendo bien que la vida con
Cristo trasciende, es mucho más que aquello que comemos o bebemos. Es justicia,
paz y gozo en el Espíritu Santo, un área de servicio que agrada a Dios y que
los hombres aprueban.
Sana doctrina: Todos compareceremos ante el tribunal de Cristo.
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