Febrero 8, Lectura: Salmo 118: 1-29
Dios es bueno
“Diga ahora que para siempre es su misericordia” (vs. 2-4) es una
frase que se manda decir a Israel, a la casa de Aarón y a los temerosos de
Jehová. ¿Cómo podemos entonar nosotros este cántico? Usando de misericordia
(Lucas 10:37).
“Jehová está conmigo…” (vs. 5-7) es otra frase que canta el salmista.
Está en angustia pero no teme, el Señor le ayuda. Estemos contentos con lo que
tenemos ahora (Hebreos 13:5,6).
“Mejor es confiar” (vs. 8,9):
Ni el hombre ni los potentados son dignos de confianza, la mejor persona en
quien confiar es el Señor. Confiemos, Cristo ha
vencido al mundo (Juan 16:33).
“Me rodearon…” (vs. 10-14): El salmista fue asediado, sitiado. En el
nombre del Señor salió adelante. El diablo es un león rugiente que busca
devorar; siendo sobrios y velando podremos resistirlo files en la fe (Pedro
5:8).
El salmista se refiere al júbilo que ha de haber en la tienda de los
justos por lo que el Señor hace (vs.
15-18); a puertas de justicia por las que sólo los justos han de poder entrar (vs.
19,20); a Cristo como la piedra desechada (vs. 22,23; 1 Pedro 2:7) y a su
entrada triunfal a Jerusalén. Los gritos de hosanna dados aquel día son
realidad para nosotros (vs. 24-26; Mt. 21:9).
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