El hombre ha preferido muchas cosas que a Dios,
Con la religión por ejemplo, se fabrica un camino,
Y alivia su conciencia con rituales sin ton ni son:
La realidad es que se ha olvidado de su Hacedor.
Ha preferido sus proyectos y Dios no está en ellos,
Le han dado fama, un grande nombre también,
Pero, ¿cuánto durará esa fama y su grandeza?
Lo cierto es que se ha olvidado de su Hacedor.
Y qué decir de sus aspiraciones, geniales para él,
Busca dominar el mundo, tener mucho dinero,
Y tal vez sólo le alcance para un lujoso mausoleo,
Lo triste es que se ha olvidado de su Hacedor.
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