Hechos varón y hembra,
Instituye Dios el matrimonio,
Forma de Dios que unirá a ambos,
Haciendo de dos, feliz monomio.
Hecho por Dios así,
No admite alteración humana,
Lo que es perfecto no se iguala,
Ni se mejora si se plagia.
Qué afán el tuyo hombre,
Que contiendes con Dios por lo perfecto,
Cuando sólo reconocer debieras,
Que tu vivir así no es recto.
La perversión es tal cual, pecado,
No opción, ni derecho lo es siquiera,
Oportunidad es al hombre si temiera
Para acercarse a Dios que aún lo
espera.
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